Economía

AENA

Aena pone en marcha la mayor operación inmobiliaria de España

Aeropuerto Adolfo Suarez Madrid Barajas. ANTONIO HEREDIA

El grupo estatal comercializará más de 2.000 hectáreas de suelo en torno a sus aeropuertos para hoteles, oficinas o centros comerciales

Fomento lanza un proyecto siete veces mayor que la Operación Chamartín

El Gobierno pretende aprovechar la recuperación del sector inmobiliario y confía en la normalización a corto plazo en Cataluña, así que ha dado luz verde a una nueva y gigantesca línea de negocio de Aena. El gestor aeroportuario público pone en marcha la que supone actualmente la mayor operación de comercialización de suelo de España: unas 2.000 hectáreas de terrenos anejos a los aeropuertos.

Al calor de la recuperación del sector inmobiliario y en la confianza de que se normalizará la situación en Cataluña, el Gobierno ha dado luz verde para que Aena lance la que será actualmente la mayor operación de comercialización de suelo de España, según aseguran a EL MUNDO fuentes autorizadas del Ministerio de Fomento.

El nuevo presidente de Aena, Jaime García-Legaz, tiene el mandato de optimizar el valor de los recursos de esta empresa de mayoría estatal para comercializar más de 2.000 hectáreas de terrenos en torno a los principales aeropuertos del país. Se trata sobre todo de suelo sin desarrollar y edificable, pero también hay parcelas ya ocupadas con una importante superficie remanente que también es susceptible de desarrollo.

Los estudios de Aena autorizados por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, implican la comercialización de suelo para construcción de hoteles, oficinas, áreas comerciales en línea con la existente en los principales aeropuertos europeos.

El suelo propiedad de Aena identificado como «potencialmente comercializable» equivale a siete veces la ya gigantesca Operación Chamartín, que afecta a 311 hectáreas al norte de Madrid y que está considerado el mayor plan de desarrollo urbanístico del momento en la Unión Europea.

Aena es un gran propietario de suelo desde su constitución en 1990 y en su plan de negocio resultan esenciales los terrenos en torno a los aeropuertos de Madrid y Barcelona. Ambos van a representar más del 50% del total a desarrollar, según las estimaciones preliminares.

En torno al Adolfo Suárez Madrid Barajas los estudios han analizado un área bruta de 921 hectáreas. Teniendo en cuenta que habrá que destinar parte a viales y zonas verdes, se estima que al menos 573 hectáreas pueden ser para parcelas de uso lucrativo tanto en suelo desarrollable como remanente.

En Barcelona, el suelo potencialmente comercializable afecta a 336 hectáreas de las cuales 211 corresponderían a parcelas netas lucrativas. El resto de la operación inmobiliaria se centra en los aeropuertos de Tenerife Sur, Jerez y Sevilla, particularmente.

Las fuentes consultadas por este diario subrayan que el proceso será desarrollado por fases y se contratarán a expertos inmobiliarios para optimizar las transacciones, que consistirán en promociones, alquileres o ventas de terrenos, en función de la opción que se considere más interesante para Aena. En algunos casos se podrá construir un hotel o, en otro, vender hangares a una compañía aérea, según los ejemplos facilitados a este diario.

El negocio para el sector inmobiliario puede ser colosal pero las fuentes consultadas aseguran que se tomarán todas las medidas de control y transparencia que corresponden al tratarse de un grupo con mayoría estatal. Aena estudia también crear una filial centrada en este área para pilotar esta estratégica línea de negocio.

El proyecto consiste en impulsar de forma masiva un negocio que ya estaba abierto en Aena de manera limitada. Según cifras oficiales, esta empresa del Ibex 35 ya posee activos inmobiliarios desarrollados equivalentes a 300 hectáreas de terreno y que dejan unos ingresos anuales de 53 millones.

La comercialización inmobiliaria actual realizada por el gestor aeroportuario incluye almacenes que ocupan 175.000 metros cuadrados, oficinas fuera de terminal en 145.000 metros cuadrados, 150 hangares, 88 naves de carga, 24 gasolineras y cinco bases de operaciones para aviación ejecutiva.

Madrid copa el 38% de esta línea de negocio seguido de cerca por el aeropuerto de Barcelona. Valencia, Palma de Mallorca y Gran Canaria destacan también, pero no otros como Tenerife Sur que se quieren aprovechar ahora.

El Gobierno quiere mostrar que, aunque mantiene la mayoría estatal en Aena, quiere seguir impulsando medidas de gestión privada que incrementen su valor y satisfaga al 49% del capital, que permanece en manos privadas. El Ejecutivo vetó antes del verano que Aena pudiera lanzar una OPA sobre Abertis pero no se opone a que desarrolle un negocio inmobiliario aprovechando sus gigantescos terrenos. Al contrario, De la Serna, satisfecho con la gestión de la también pública Adif en la Operación Chamartín, está impulsando personalmente este proyecto en Aena.

El gestor público aeroportuario ha recuperado niveles de cotización previos a la marcha del anterior presidente, José Manuel Vargas, y cerró ayer a 159,40 euros por acción lo que equivale a un valor en Bolsa superior a los 24.000 millones de euros. El día que dimitió Vargas, el pasado 26 de septiembre, cada título cotizaba a 151 euros.